ABRAZAR LA INCERTIDUMBRE: El arte de fluir con la vida
- Tu Coach Abril

- 28 abr
- 3 Min. de lectura

Por ActionCOACH Abril Morales
Vivimos en tiempos acelerados, llenos de cambios y situaciones que parecen salirse de nuestro control: geopolítica, guerra, el tema de las energías y la "Trumpicalización" del mundo. Esto crea un caldo de cultivo para querer tirar la toalla o al menos sentir miedo. Pero hay que aceptar que la incertidumbre es parte natural del viaje. Muchas veces nos aferramos a querer tener todo bajo control, más aún como dueños de negocios que generalmente tienen un perfil “Dominante” y eso solo genera estrés, ansiedad y frustración.
¿Qué pasaría si, en vez de luchar contra lo inevitable, aprendieras a abrazar la incertidumbre como parte esencial de tu crecimiento?
Se está creando un nuevo orden mundial y, en este reacomodo, estarán los que extrañen el viejo orden y se aferren a él o los que lo acepten y decidan navegar en aguas turbulentas. La ventaja de estos últimos es que serán los primeros en llegar a tierra firme, sin competencia y con terrenos vírgenes. ¿Suena emocionante? ¿Listo para pagar el precio? Pues a abrazar, y abrazar fuerte.
Te comparto una metáfora de la vida que tengo:
La vida te da rosas. Algunas veces te las da con los pétalos por delante, y nunca dudamos en abrazar fuerte y hundirnos en la suavidad y los aromas que nos deleitan.
Otras veces, nos da los tallos por delante, llenos de espinas, rasposos y feos. No aceptamos porque sentimos que no merecemos eso. Sin embargo, si nos atrevemos a abrazar las espinas fuertemente, aunque raspen, hieran y duelan, eventualmente llegaremos a los pétalos, y sabrán mejor sus caricias y aromas.
En nuestro caminar por la vida, solo recordamos esta parte hermosa y olvidamos que casi nunca llegaron los pétalos sin antes haber abrazado fuerte las espinas.
Abrazar la incertidumbre significa aceptar profundamente que no podemos controlar cada aspecto de la vida. Implica soltar expectativas rígidas y empezar a fluir con aquello que ocurre, abriendo paso a un camino lleno de bienestar y equilibrio.
Beneficios que transforman vidas
Cuando decides aceptar la incertidumbre, logras:
Construir un futuro más positivo, abriéndote a nuevas posibilidades que quizá ni habías considerado.
Superar los desafíos de la vida con una actitud más serena y efectiva.
Tomar decisiones desde tus valores reales, no desde el miedo o la ansiedad.
Transformar los retos en oportunidades, convirtiendo cada experiencia en una posibilidad de crecimiento personal y profesional.
Experimentar mayor tranquilidad, paz y bienestar, sabiendo que la vida fluye con naturalidad.
Reducir notablemente la ansiedad, estrés y frustración, porque ya no intentas controlar lo incontrolable.
Desarrollar una mayor flexibilidad, convirtiéndote en alguien adaptable ante cualquier circunstancia.
Cómo empezar a abrazar la incertidumbre
No se trata solo de una teoría bonita, sino de prácticas concretas que puedes implementar desde hoy:
Deja que la vida te sorprenda: abandona la necesidad de saberlo todo y permite que las cosas se revelen por sí mismas.
Acepta que no todo está en tus manos: comprender profundamente que hay situaciones fuera de tu control libera mucha energía mental y emocional.
Fluye con lo que sucede sin ansiedad: recuerda que resistirte solo prolonga el malestar.
Confía en que lo que ha de ser, será: desarrolla una fe activa en el proceso, entendiendo que cada experiencia tiene su razón y aprendizaje.
Cultiva una mentalidad resiliente: aprende a levantarte tras cada caída, más sabio y fuerte.
Practica mindfulness o atención plena: esto te permitirá vivir cada momento presente sin ansiedad hacia el futuro o tristeza por el pasado.
Reconoce tu vulnerabilidad e incompletitud: abrazar que no lo sabes todo ni necesitas saberlo todo te hace auténticamente humano y te conecta contigo y con los demás.
Enfócate en soluciones reales: pon tu energía en lo que sí puedes controlar y haz que esas acciones cuenten verdaderamente.
El poder de abrazar la incertidumbre
Abrazar la incertidumbre es una decisión poderosa que puede cambiar radicalmente tu calidad de vida. Es hora de soltar, confiar y fluir con autenticidad.
Y ahora más que nunca, necesitas un coach que te mantenga enfocado en la meta, que te permita revisar las estrategias y ajustar las pequeñas metas. Un coach que esté contigo cuando desfallezcas para darte fuerza emocional o simplemente para pedirte "Menos Drama y Más Acción". Porque habrá momentos en los que solo tocará continuar adelante: pondrás la rodilla al piso, tomarás aire y seguirás avanzando.
Un coach que te ayude a abrazar la incertidumbre, aunque afuera todos te digan que "la cosa está muy fea" y que hay que esconderse.
¿Te atreves a dar el paso? 🚀
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